Un grupo de aproximadamente 50 supervivientes del campo de concentración y exterminio nazi de Auschwitz participó en el primero de los actos conmemorativos del 80 aniversario de su liberación, llevando a cabo una emotiva ceremonia frente al emblemático «muro de la muerte».

En el lugar, conocido como el «bloque 11», que albergó celdas de castigo, los supervivientes depositaron coronas de flores y encendieron velas en memoria de las víctimas que perecieron allí, víctimas del régimen nazi.

El acto se desarrolló en el mismo sitio donde miles de prisioneros fueron fusilados durante la Segunda Guerra Mundial, y el muro, que originalmente fue destruido en 1944, fue reconstruido para rendir homenaje a los caídos.

Con visibles muestras de emoción, muchos de los participantes, algunos acompañados de sus familias, portaron brazaletes con la estrella de David y pañuelos con las distintivas rayas blancas y azules que formaban parte de los uniformes de los prisioneros. Algunos supervivientes, visiblemente conmovidos, apoyaron sus manos sobre las piedras del muro como símbolo de respeto y recuerdo.

A continuación, el presidente de Polonia, Andrzej Duda, depositó una ofrenda floral en honor a las víctimas y los supervivientes, participando en un solemne homenaje a los miles de prisioneros que sufrieron en Auschwitz.

El 27 de enero se conmemora cada año la liberación de Auschwitz, ocurrida en 1945 por el Ejército soviético, y desde 2005 la Organización de Naciones Unidas ha establecido esta fecha como el Día Internacional en Memoria del Holocausto.

Este año, en el marco del 80 aniversario de la liberación del campo, los organizadores del evento decidieron que los supervivientes serían los protagonistas principales de la jornada, por lo que no se permitieron declaraciones de políticos, salvo la intervención del presidente polaco, quien pronunció un discurso en el que destacó la importancia de recordar este oscuro capítulo de la historia para evitar que se repita.

La ceremonia en Auschwitz sirve como recordatorio de la brutalidad del Holocausto, un genocidio en el que millones de personas, en su mayoría judíos, fueron sistemáticamente exterminados por el régimen nazi.

Este aniversario invita a reflexionar sobre la necesidad de mantener viva la memoria histórica y garantizar que las generaciones futuras nunca olviden los horrores de la Segunda Guerra Mundial y las lecciones que debemos aprender de él.

Fuente: López-Dóriga