A pesar de sus dificultades, Adrián Sánchez hace todo lo posible por ganarse, por lo menos, una moneda; realizando acciones que le gustan y lo llenan de felicidad

Morelia, Michoacán; 12 de enero de 2025.- Durante poco más ocho años, Adrián Sánchez, un ciudadano con Síndrome de Down, diariamente asiste a su trabajo en el Mercado Revolución, de la ciudad de Morelia, con la finalidad de poder comprarse comida, ropa, etc.

De acuerdo con compañeros y algunos familiares de Adrián, también llamado como «Yiyo», este último realiza sus actividades con mucho ánimo, lo cual, ha sido reconocido por toda aquella persona que lo ha conocido.

“Parte para distraerse y para trabajar, a él le gusta el trabajo; en donde lo pongan, trabaja. Anteriormente estaba trabajando de cerillero en Chedraui… Más que nada, siento felicidad hacía él (Adrián), porque le sirve para distracción y a parte, le ayuda a su mamá, que ya está grande”, expresó José Sánchez Navarrete, tío de Adrián «Yiyo».

“El Yiyo a veces se la pasa cantando, pero sí, mucha gente lo conoce, mucha gente lo estima… A veces le dan su moneda, la gente ya lo conoce; a veces aquí en la entrada del estacionamiento se queda y le hablan y le dan algo, para un taco o algo. Porque a él le gusta trabajar. El no puede hacer algunas cosas, pero le digo que no se desanime, que la gente le da monedas casi siempre. También a veces le invitamos un taco”, declaró Armando, compañero de «Yiyo».

A pesar de sus dificultades, Adrián hace todo lo posible por ganarse por lo menos una moneda, realizando acciones que le gustan y lo llenan de felicidad.

Tanto locatarios del Mercado Revolución, como también los mismos clientes, y compañeros, todos ellos cuidan a «Yiyo». Destacan la gran oportunidad que se le brindó a este gran ser humano, para poder trabajar y ganarse su propio dinero.

Adrián «Yiyo» Sánchez, hizo una cordial invitación a toda la población para asistir al Mercado Revolución y comprar su despensa, además, de pasar a saludarlo y claro, darle por lo menos, un tostón.

“Todo está muy padre, me gusta. La gente va y viene, y me dan un tostón, de poco a poco. Sí viene mucha gente, que va y viene, todos van y vienen. Muy padre”, fue el sentir de Adrián Sánchez.

Todos los días, de 8 de la mañana a 4 de la tarde, «Yiyo» trabaja en el estacionamiento del Mercado Revolución, ya sea de «viene-viene» o ayudando a lavar los vehículos.