EUA cambia el nombre del Golfo de México a Golfo de América, reafirmando su rol clave en la economía nacional
El gobierno de Estados Unidos (EUA) ha anunciado el cambio oficial de nombre del Golfo de México, que ahora será conocido como Golfo de América, y del monte Denali en Alaska, que se renombrará como monte McKinley, según un comunicado del Departamento del Interior.
“De conformidad con la reciente orden ejecutiva del presidente Donald J. Trump, el Departamento del Interior se enorgullece de anunciar la implementación de restauraciones de nombres que honran el legado de la grandeza estadounidense, esfuerzos que ya están en marcha”, indica el comunicado.
La dependencia explica que estos cambios “reafirman el compromiso de la nación de preservar el extraordinario patrimonio de EUA y garantizar que las futuras generaciones de estadounidenses celebren el legado de sus héroes y sus bienes históricos”.
La actualización de la nomenclatura federal oficial por la Junta de Nombres Geográficos del país se hará efectiva “con vigencia inmediata para uso federal” a partir de la fecha de actualización, de acuerdo con el Departamento del Interior.
En cuanto al Golfo de América, desde Washington se destacan sus “contribuciones duraderas” a la “vitalidad económica de Estados Unidos”, enfatizando que la decisión de Trump de cambiar formalmente su nombre solo “reafirma su importancia central para la nación”.
Respecto al monte McKinley, renombrado así en honor a William McKinley, el 25º presidente de Estados Unidos, se destaca como “un monumento a la fuerza y determinación” del presidente, quien “condujo heroicamente a la nación a la victoria en la guerra hispanoamericana, promoviendo una era de rápido crecimiento económico y ganancias territoriales para la nación”.
El Departamento del Interior reitera su compromiso con los principios de la orden ejecutiva de Trump, asegurando que los nombres utilizados “reflejan los valores, sacrificios y logros que definen nuestra nación”.
Este anuncio sigue al rechazo de la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, a la propuesta inicial de Trump, quien había sugerido renombrar el golfo de México mucho antes de retomar el poder, generando una respuesta irónica por parte de Sheinbaum sobre la denominación de EUA.