Morelia, Michoacán, 18 de diciembre de 2024.- Como se esperaba, el pasado fin de semana, por unanimidad, Carlos Quintana Martínez fue electo por los consejeros estatales como próximo dirigente estatal del PAN.
Lo que resta es puro trámite, pero llama la atención que después de tantos años de marcadas divisiones en el panismo michoacano, entre los markistas y los markistas, finalmente lograron ponerse de acuerdo en algo.
Justo ahora, cuando parecería que tienen el agua casi hasta el cuello frente al actual régimen político.
Fundamental para que se haya tomado esta decisión, el primer gran acuerdo del que hablé hace varios meses en este mismo espacio, entre el entonces dirigente nacional, Marko Cortés Mendoza, y los principales liderazgos del PAN en Michoacán.
¿De quiénes habló? Por supuesto, de los diputados federales, José Manuel Hinojosa Pérez y Armando Tejeda Cid, así como del propio ex diputado federal, dos veces diputado local y ex candidato a la alcaldía de Morelia, Carlos Quintana.
De ahí en adelante, el también ex secretario estatal de Acción Juvenil comenzó a dialogar en cascada con el resto de los liderazgos regionales del blanquiazul, incluyendo a los diputados locales, Teresita Herrera Maldonado, Vanessa Caratachea Sánchez, Alfonso Chávez Andrade y Antonio Salas Valencia.
Por su formación eminentemente panista, por su trayectoria y por su buen trato, pero sobre todo por haber buscado con tiempo los consensos, Quintana Martínez alcanzó la unanimidad entre los consejeros estatales presentes el pasado fin de semana en La Piedad.
Sin embargo, no debe pasar por alto que entre el resto de la militancia panista, empezando por el últimamente muy ausente secretario general de la dirigencia estatal, Javier Estrada Cárdenas, no necesariamente hay un respaldo unánime.
El reto de Carlos Quintana será convencer a todos los escépticos -que no son tan pocos que digamos- de remar en la misma dirección en estos momentos en los que la crisis política hace fuerte mella entre la poca oposición visible que queda.
También tendrá que ser eficiente y eficaz para comunicar, así como buscar ser más mediático, algo en lo que no ha estado muy interesado a lo largo de su carrera política y en lo que la saliente Refugio Cabrera Hermosillo falló, fracaso, por lo menos fue gris, muy gris -para ser amable-.
Porque si el PAN no logra ganar los debates en tribuna ante la arrolladora aplanadora de la 4T (Morena-PT-PVEM) en los congresos federal y local, por lo menos debería buscar ganarlos mediáticamente, ante la opinión pública.
Eso ya sería ganancia para ellos.
¿Lo logrará? Sólo el tiempo lo dirá.
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