La búsqueda del menor en agua con cocodrilos en Michoacán concluye sin éxito, tras intensos operativos de rescate.
Lázaro Cárdenas, Michoacán.- Sin éxito, PC Michoacán dio por concluida la búsqueda del menor que cayó al agua del estero en el que habitan cocodrilos en Barra de Santa Ana, en Lázaro Cárdenas.
Andrés Alejandro, de 14 años y originario de Cortazar, no fue hallado pese a las jornadas de búsqueda en las que participaron distintas corporaciones de auxilio y de seguridad, incluida la Secretaría de Marina.
De acuerdo con la información publicada en las redes sociales de Protección Civil Michoacán, este 21 de junio, se realizó la última jornada de búsqueda del menor.
A pesar de los intensos esfuerzos, no se logró localizarlo tras recorridos exhaustivos por tierra y agua, apoyados por drones.
En el operativo participaron de manera coordinada además de la Secretaría de Marina el personal de:
- Guardia Civil
- Sistemas Especializados en Construcción
- Seguridad Pública
- Comisión de Búsqueda de Personas del Estado de Guanajuato
- Protección Civil Estatal y Municipal
- Salvavidas Municipales
La búsqueda se llevó a cabo tanto por tierra, explorando la orilla de los manglares, como por lanchas, con el objetivo de localizar el cuerpo del menor. Lamentablemente, no fue posible hacerlo.
Durante los últimos cuatro días se realizaron operativos con la esperanza de encontrarlo, pero hoy, 21 de julio, se concluye la búsqueda al considerarse imposible dar con sus restos.
Como se recordará, el pasado viernes 18 de julio, el menor Andrés Alejandro, de 14 años y originario de Cortázar, Guanajuato, llegó junto con su familia al municipio de Lázaro Cárdenas para disfrutar de unas vacaciones de verano en la playa. Sin embargo, hicieron una parada en la Barra de Santa Ana, específicamente en el estero de Cocodrilos, conocido por albergar a estos reptiles en su hábitat natural.
En ese momento, Andrés Alejandro, intentó brincar de un extremo del puente al otro, cayendo al agua. Desafortunadamente, los cocodrilos lo atacaron y lo sumergieron en aguas profundas, siendo esta la última vez que lo vieron con vida.
Desde ese momento, las autoridades estatales, municipales y federales montaron un operativo para intentar localizarlo con vida.
Al no poder hacerlo, los esfuerzos se enfocaron en rescatar su cuerpo. Sin embargo, debido a las condiciones del hábitat de los cocodrilos y la dificultad para acceder a ciertas zonas, no fue posible encontrar los restos del menor Andrés Alejandro.