Morelia, Michoacán

El gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla declaró que los sucesos ocurridos ayer 19 de febrero, donde un joven estudiante fue secuestrado y luego murió al ser víctima de fuego cruzado es un hecho desafortunado.

“Hubo una situación compleja, se atendió el código rojo, desafortunadamente hubo una resistencia armada de los delincuentes, en el fuego cruzado murió el joven secuestrado, es muy desafortunado”, manifestó el gobernador.

Agregó que el código rojo funcionó ya que las fuerzas de seguridad actuaron coordinadamente, se le pudo dar persecución y alcance a los secuestradores, sin embargo, ellos respondieron con fuego, lo que propició el enfrentamiento y el trágico desenlace.

Los hechos indican que el joven, identificado como Luis Alberto de 16 años, originario de California, se dirigía a clases al Instituto Morelos en el centro de Uruapan.

Ahí fue interceptado por los secuestradores que lo obligaron a manejar su propia camioneta, las autoridades estatales y federales recibieron el reporte de secuestro y con la acción coordinada elementos del ejército localizaron el vehículo.

Tras una persecución en la carretera Uruapan-Ziracuaretiro, se originó un enfrentamiento armado entre los secuestradores y el ejército.

Luis Alberto resultó herido, fue trasladado a un nosocomio de Uruapan, dónde perdió la vida. En el lugar fue abatido uno de los delincuentes y otro fue detenido.

El mandatario señaló que los detalles del suceso, la aclaración de ellos y la carpeta de investigación está a cargo de la Fiscalía General del Estado de Michoacán (FGE).