La alcaldía Tlalpan, Ciudad de México, ha sido escenario de un hallazgo aterrador, el cual llama la atención de las autoridades y la comunidad local. El cuerpo del hombre presentaba visibles signos de tortura y el abdomen abierto, fue localizado en la entrada de una cueva que era utilizada como presunto altar dedicado al Diablo.
Los hechos fueron dados a conocer por el periodista de seguridad Carlos Jiménez, lo cual ha generado preocupación por la presencia de prácticas ocultistas en zonas aisladas al sur de la capital mexicana.
El macabro descubrimiento sucedió durante la mañana del día martes 10 de diciembre, en la conocida «Cueva del Aire», un paraje boscoso que tiene difícil acceso en la zona rural de San Miguel Topilejo.
Al lado del hombre también se encontraban los restos de una vaca muerta, ambos estaban siendo devorados por perros del área.
Al interior de la cueva, las autoridades reportaron el hallazgo de objetos para rituales, muñecos extraños, veladoras, charolas con líquido rojizo, el cual posiblemente era sangre y la inscripción de un «666» en las paredes.
Dicha cueva se encuentra en un terreno accidentado, muy cerca del volcán Pelado, al oeste del pueblo de Parres, en Tlalpan. De acuerdo con los vecinos de la zona, entrar al lugar requiere de caminar varios kilómetros, limitando el tránsito frecuente, salvo por los ejidatarios que ya conocen los caminos.
Finalmente, la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) comenzaron las indagatorias correspondientes para aclarar los hechos. Las autoridades buscar determinar si este acto responde a un homicidio relacionado con prácticas esótericas o de un intento de encubrimiento de crimen.
Fuente: Debate