México detiene la importación avícola brasileña debido a un brote de gripe aviar, protegiendo así su industria avícola nacional.
México ha decidido suspender temporalmente la importación avícola brasileña debido a un brote de gripe aviar; Esta medida busca proteger la industria avícola nacional, según informó la el sábado.
“México decidió suspender la importación de productos avícolas provenientes de Brasil, en tanto se recibe información zoosanitaria sobre la atención del brote”, declaró la Secretaría en un comunicado.
Como resultado, se ha prohibido la entrada al país de carne de ave, huevo fértil, huevo libre de patógenos específicos, pollos de hasta tres días de nacidos, despojos avícolas para consumo humano, así como aves canoras, de ornato y rapaces.
Pollo brasileño
Brasil, reconocido como el mayor exportador de pollo a nivel mundial, ha detectado el virus de la influenza aviar altamente patógena (IAAP) en una granja comercial por primera vez.
Este hallazgo ha llevado a varios importadores, incluyendo a China, a imponer restricciones.
En 2024, Brasil exportó carne de pollo por un valor de 10.000 millones de dólares, representando aproximadamente el 35% del comercio global.
Carlos Favero, Ministro de Agricultura de Brasil, indicó que los funcionarios veterinarios están trabajando para aislar el área afectada en Montenegro y sacrificar las aves restantes, siguiendo los protocolos establecidos.
“Se llevará a cabo una investigación complementaria en un radio inicial de 10 kilómetros de la zona donde ocurrió el brote, y sobre posibles vínculos con otras propiedades”, informó la secretaría.
Influenza aviar
El ministerio ha asegurado que está tomando todas las medidas necesarias para controlar y erradicar el brote, notificando oficialmente a la Organización Mundial de Sanidad Animal, socios comerciales y otras partes interesadas.
El Ministerio de Agricultura afirmó que la enfermedad no se transmite a través del consumo de carne o huevos de aves de corral, y que el riesgo de infección humana es bajo, afectando principalmente a aquellos en contacto directo con aves infectadas.
“La población brasileña y mundial puede estar tranquila sobre la seguridad de los productos inspeccionados, y no hay restricciones a su consumo”, añadió el comunicado.
El servicio veterinario brasileño, con experiencia desde la primera década de este siglo, está capacitado para enfrentar esta enfermedad.
Las acciones incluyen el monitoreo de aves silvestres, vigilancia epidemiológica en la avicultura comercial y de subsistencia, y la capacitación constante de los técnicos.